Medicación y embarazo

Ya os he contado en alguna ocasión que durante la lactancia tenéis a vuestra disposición un gran recurso para saber qué medicación es compatible con la lactancia, cual es el nivel de riesgo, sus efectos e incluso alternativas con menos riesgo si las hubiera. Esta es la web E-lactancia. Sin embargo, durante el embarazo yo me he visto también en algunos momentos en situaciones en las que no tenía claro si podría o no tomar una medicación. Parece que todo es contraindicado para la embarazada. Y evidentemente el feto tanto por su estado de desarrollo como por el hecho de recibir sus nutrientes directamente  a través de la placenta, está mucho más expuesto a cualquier tóxico que consuma la madre que un lactante. Sin embargo no todos los medicamentos son peligrosos, y por el contrario puede haber medicamentos que parezcan inofensivos, por el uso cotidiano que hacemos de ellos, y no lo sean tanto.

El recurso que he encontrado para que la mujer embarazada tenga información actualizada y completa sobre medicación es el Teléfono de Atención a la Embarazada  gestionado por la Fundación 1000 sobre defectos congénitos. Aquí podéis consultar su web donde encontrarás toda la información sobre este servicio gratuito.

Además pueden ofrecerte información sobre cualquier otro asunto relacionado con posibles defectos congénitos en los recién nacidos, información sobre exposición a radiación, toxoplasmosis, vacunas y embarazo, interrupción del embarazo por defecto congénito...

Aparte de esto también ofrecen información a los profesionales que la necesiten, en ese caso tendrían que contactar con el SITTTE (Servicio de Información Telefónica sobre Teratógenos Español).

Conozco este recurso porque ayer mismo tuve que hacer uso de él. Y menos mal que se me ocurrió hacerlo, porque de lo contrario habría tomado un medicamento que está contraindicado con el embarazo por ser un vasoconstrictor. Imaginad qué efecto podría haber tenido en el bebé el hecho de que se estrecharan los vasos sanguíneos de la placenta... Lo peor de esto es que fue mi médico de cabecera la que me lo recetó, siendo perfectamente consciente de mi embarazo. En este caso además es un antihistamínico, es decir que ni siquiera podríamos hablar de que tiene algún sentido tras valorar riesgos vs beneficios...

Como me extrañó, tras leer el prospecto, que ese medicamento fuera compatible con el embarazo llamé al Teléfono de Atención a la Embarazada. Me atendió una doctora, de primeras tuve que darle algunos datos :Nombre completo, FUR, FPP, medicación que pudiera estar tomando, si ha habido alguna dificultad en el embarazo... Tras esta primera recogida de datos planteé mi duda sobre el medicamento en cuestión y tras explicarme que no era compatible, y los motivos por los que no lo era, me ofreció una alternativa que sí podía tomar con tranquilidad. Después me preguntó si estaba interesada en que me hiciese la historia clínica y recibir en casa información durante el embarazo. A mi me pareció que podría ser interesante, así que efectivamente me hizo una entrevista muy completa, que incluía antecedentes de problemas de salud o discapacidades en mi familia, la de mi pareja, el trabajo que desempeño, sustancias a las que puedo estar expuesta, resultados del triple screening... Y me dió también alguna información sobre la toxoplasmosis que me pareció bastante útil. Por ejemplo yo no había caído en que fuera de casa mejor no pedir gazpacho, porque podrían haber lavado mal las verduras y transmitir la toxoplasmosis...

El servicio por mi experiencia es muy útil y sencillo de utilizar. Así que si tenéis alguna duda sobre cualquier medicamento o cualquier teratógeno al que podráis estar expuestas por temas laborales, médicos... no dudéis en utilizarlo y así os quedáis más tranquilas.