Cuándo tienes un bebé la concepción de las vacaciones varía, mucha gente te dice que con niños no puedes viajar. Y desde luego que quizás no puedas hacer los mismos planes que hacías cuándo érais sólo dos, pero eso no quiere decir que no se puedan disfrutar de las vacaciones. Nosotros salimos por primera vez de Madrid cuándo Emma tenía 20 días. Nos fuimos unos días a la playa, nos sirvió para tener nuestro espacio los tres, asimilar el cambio, casi podría decir que nos permitió conocernos de verdad sin tanta gente alrededor. Las visitas al principio son un obstáculo importante, que al menos en nuestro caso, nos impedía tomar conciencia de lo que estábamos viviendo, así que estas primeras vacaciones fueron prácticamente una escapada, en el sentido literal de la palabra.
Pero realmente nos hemos ido de vacaciones "de las de verdad" hace unos días. Fuimos a Asturias, un destino que a pesar de haberlo elegido ya en muchas ocasiones nos sigue encantando. Cuándo hemos viajado allí otras veces nos hemos movido mucho, vas a un sitio, vas a otro, pasas el día fuera de casa, y estas vacaciones han sido un poco diferentes, hemos tenido que estar pendientes no solo de nosotros, sino de las necesidades de Emma, para ello nos hemos organizado de forma distinta, por ejemplo:
- Hemos procurado no elegir destinos que estuvieran muy alejados de la casa rural donde nos alojábamos, porque a la enanilla el coche no le gusta un pelo y se cansa bastante pronto, así que elegimos unos apartamentos rurales que estaban situados en una zona accesible (cerca de la autovía, cerca de puntos que nos interesa ver...) para no estar metidos en el coche más de lo imprescindible.
Si por ejemplo quieres ver bastantes cosas, quizás no sería mala idea, si vas con tiempo suficiente, ir a dos alojamientos distintos, de forma que primero exploréis una zona y luego otra, sin daros tanta palicilla de coche.

- El alojamiento estaba adaptado para la niña, estuvimos en los apartamentos rurales "La Canalina", un lugar en el que ya habíamos estado unos años atrás. Espacio que recomiendo si vas con niños porque está muy bien acondicionado (préstamo de trona, de cuna si la necesitas, cocina totalmente preparada con el menaje necesario, tenía una bañera enorme que nos ha encantado, además tienes un espacio de porche para que juegue en la calle, una zona de columpios. La verdad es que cuidan todo al detalle, limpieza, comodidad...).
Siemprehemos preferido ir a un apartamento o una casa rural antes que a un hotel sobre todo por la comodidad de tener cocina, más espacio... Ahora con Emma es más importante aún disponer, sobre todo, de la cocina, así que seguiremos buscando este tipo de alojamientos. Aunque por lo que he comentado con algunas familias, hay hoteles muy bien adaptados para ir con bebés o niños pequeños, supongo que esto es cuestión de gustos.
Siemprehemos preferido ir a un apartamento o una casa rural antes que a un hotel sobre todo por la comodidad de tener cocina, más espacio... Ahora con Emma es más importante aún disponer, sobre todo, de la cocina, así que seguiremos buscando este tipo de alojamientos. Aunque por lo que he comentado con algunas familias, hay hoteles muy bien adaptados para ir con bebés o niños pequeños, supongo que esto es cuestión de gustos.
- En estas vacaciones el porteo ha sido fundamental, hemos utilizado sobre todo la manduca, y de ese modo hemos podido andorrear por donde nos ha apetecido, y entrar en lugares que con el carro hubiera sido imposible. Ella encantada de conocer sitios nuevos, ver tantos animales, sobre todo un burro chillón que había cerca de la casa...
- Nos ha resultado práctica también la típica tiendecita de campaña que se monta en un segundo, por ejemplo nos ha servido para tratar de controlar que Emma se convirtiera en una croqueta con la arena de la playa antes de tiempo, guardar sus cosas, dejarla a la sombra cuándo se ha dormido... La nuestra es de Saro, pero en Decathlon o en Imaginarium podéis encontrar productos similares. La foto era de esas primeras "vacaciones-escapada".
- Algo que sí hemos procurado es respetar el tiempo de sueño de la peque, porque ella demanda que lo hagamos así, el tiempo sobre todo de siesta larga después de comer para ella es necesaria, si no duerme ese rato está incómoda toda la tarde. Y no podíamos estar hasta tarde por el mismo motivo, le entra el sueño y no está a gusto. Así que respetando ese espacio que ella necesita, no hemos tenido más cables que nos ataran.
En definitiva, la experiencia de ir de vacaciones con Emma ha sido muy buena, lo hemos pasado genial los tres juntos, y aunque han sido diferentes han sido muy satisfactorias. Así que estamos deseando repetir de nuevo, que como suele ocurrir, parece que han sido hace mucho mucho tiempo.